viernes, 23 de octubre de 2015

EL PRIMER BESO

Siempre se escucha que el primer beso es un desastre, algo que no te esperas y ante el que no sabes reaccionar. ¿Os creeríais si os contara que mi primer beso pudo haber sido en un lugar idílico bajo la luz de las estrellas haciéndole sombra a la luna y no lo fue? Pasó en un lugar menos bucólico, y si, fue un verdadero desastre. 

Pero por ahí no van los tiros. Hacía tiempo que no conocía una persona como él. No fue un flechazo. No fue amor a primera vista, más bien odio a primera vista. Era alguien que quería lejos de mi desde el minuto uno, pero a la vez tan cerca... ¿Cómo podía ser posible aquella antítesis? 

Por suerte el "odio" desapareció a las 24 h cuando no si por puro palabrerío o no, me dijo: "Te voy a cuidar." Nunca me habían dicho esas palabras de protección y el dolor de estómago que tenía desapareció de golpe. Solo podía escuchar lo que él me decía y nada más a nuestro alrededor. Los días pasaban y el contacto se hacía más y más evidente. Necesitaba sus abrazos, su caricias, y hasta sus besos. Pero algo no me convencía. Ese palabrerío extremo me desconcertaba. No me creía absolutamente nada de lo que me decía. Ni siquiera el "Me encantas". Nunca antes lo escuché. Quizá esa fue su carta maestra. Quizás eso fue lo que hizo que me fijara en él. 

Pero ocurría algo más. El me repetía cada día que quería besarme y yo no sabía por dónde empezar. Es cierto que hubieron oportunidades, pero allí, en aquél lugar demasiado perfecto no quería que pasara. Me sentía indefensa en aquél país lejos de casa, poco preparada, cercada, cómo si no tuviera sitio por dónde escapar si la cosa no salía demasiado bien. Así que esperé a volver a Madrid. Y una vez allí, en medio de la Gran Vía, pasó. Olvidé los cientos de coches que circulaban a derecha e izquierda, las luces, la gente, todo. Me dejé llevar. Pero aún a día de hoy trato de expresarle lo que realmente siento por él. Se me hace difícil, Nunca antes he exteriorizado mis sentimientos. Pero no quiero que huya y me vuelvan a dejar con el corazón roto como la última vez. Quiero decirle que me encanta, que es la persona que más me ha echo sentir en tan poco tiempo. Quiero decirle que me encantan sus ojos de aspecto triste y sus largas pestañas. Me encanta que me bese cuando menos me lo espere y esa pasión que hace que tenga infinitas ganas de abrazarlo. 

Pero ¿para cuándo? ¿cuándo lograré decirle lo que siento? 
Espero que no sea demasiado tarde cuando lo haga.